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Comenzar con buen pie
Hay que ser realista, maquetar HTML para correo electrónico es un mundo a parte. Hay muy pocas reglas que cumplan todos los clientes, así que si no tienes una gran experiencia en este campo lo mejor es comenzar con una plantilla que funcione e ir haciendo cambios.
Gracias a Campaign Monitor y MailChimp que ofrecen plantillas gratuitas para el envío de newsletters, tenemos por donde comenzar:
Además podemos combinar elementos de varias plantillas para conseguir el efecto deseado.
Una consideración interesante es la anchura de los contenidos. Aunque las pantallas cada vez son mayores, también aumenta la tendencia a leer los mensajes desde entornos webmail (por ejemplo Gmail, Yahoo, Outlook Web Access, etc).
Si observamos este tipo de entornos, comprobamos rápidamente que gran parte del espacio lo ocupa un menú o simplemente publicidad, dejando un ancho bastante reducido para la lectura de los emails.
La inercia nos lleva a crear los emails con un banner inicial que presente la imagen de la marca de la empresa y el gran titular que queremos promocionar. Pero ésta no es una buena opción, ya que muchos clientes tendrán bloqueadas las imágenes y nuestro email quedará sin cabecera y sin saber quién nos está enviando la información y de qué nos están hablando.
Tenemos dos opciones: insertar las imágenes dentro del mensaje para que el usuario no tenga que bajárselas. O bien incluir el contenido en forma de texto real con posicionamiento CSS con una imagen de fondo (asumiendo que el receptor podrá ver las imágenes de fondo, un poco arriesgado, pero la tendencia de los clientes tiene que ser soportar dichas imágenes). Esto implica que al menos las newsletters siempre presentarán toda la información.
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